miércoles, 12 de diciembre de 2012

Remember - Crítica "The box"




SiNoPsIs

      Año 1976. Una familia norteamericana recibe la visita de un misterioso hombre con una caja. Dicho individuo les propone un "negocio": si aprietan el botón de la caja, recibirán automáticamente el pago de un millón de dólares pero, por contra, alguien, en algún lugar del mundo, morirá. ¿Tú que harías?


FiChA
Título: The box
Año: 2009
País: EE.UU
Director: Richard Kelly
Reparto: Cameron Diaz, James Marsden, Frank Langella, James Rebhorn, Holmes Osborne, Sam Oz Stone, Gillian Jacobs, Celia Weston, Deborah Rush, Lisa K. Wyatt 
Género: Thriller/Ciencia-Ficción



ImÁgEnEs











TrAiLeR



CrÍtIcA


     Si por algo me atrajo una cinta como The Box, además de por el hecho de poder ver cómo se desenvuelve Cameron Diaz fuera del género que mejor domina como es la comedia, fue lo particular de su argumento. Pero a la vez, algo en mi interior me decía que una historia tan prometedora no podía poseer un desarrollo y posterior desenlace a la altura de los primeros compases, tal y como he ido descubriendo últimamente. A pesar de que también se presentó en mi mente esa otra vocecilla que intentaba instaurar un atisbo de esperanza, alegando que quizá esta película podía ser diferente, mis peores temores se confirmaron. 

       El principal problema que arrastra The Box es que deja entrever su obsesión por intentar explicar la existencia de la caja y todo lo que le rodea. Tanto es así, que el argumento se pierde en un mar de justificaciones casi innecesarias, en lugar de decantarse por desarrollar otras cuestiones a priori más interesantes de cara al espectador como las diversas cuestiones éticas en las que no se llega a profundizar (las consecuencias de pulsar el botón), o las fantásticas, cuya ejecución resulta en su mayoría insatisfactoria, rozando en ocasiones el ridículo (las puertas de agua). Además, existen otros puntos negros que empañan aún más el resultado final: uno de los más llamativos es que a lo largo del visionado de la película se tiene la sensación de que los hechos se suceden sin cesar y las aclaraciones (que no explicaciones) escasean. Este recurso, si se usa debidamente, dosificándolas, resultan estimulantes para el espectador; mal empleado, acaba con el público totalmente perdido. Lamentablemente, en The Box se decantan por la segunda opción. Otra desagradable sensación que nos asalta viendo el presente film es la de que faltan "cachos", "huecos", como si al rollo del film le hubiesen quitado decenas de fotogramas en la sala de montaje (véase la parte del accidente del automóvil y la que sigue). 

       En lo correspondiente a la banda sonora, seguimos encontrándonos con más desagradables sorpresas. Y es que, pese a que los diversos temas encajan perfectamente con el estilo de la película, no están situados en los lugares que les corresponden, y muchas veces oiremos una música impropia del momento que se nos muestra. Del final del film, mejor no decir nada más que, en cierta forma, resulta insatisfactorio (palabra que parece definir perfectamente la mayor parte de los aspectos del film). Aún así, no todo es deficiente en The Box. La primera mitad del film, con toda esa aparente normalidad y esa atmósfera que impregna cada una de las escenas de un mal rollo, llamémoslo, silencioso, no explícito, es digna de elogio. Además, los actores no están tan mal: Cameron Diaz está solvente, al igual que su marido en la ficción, James Marsden. Pero de entre todo el reparto, sobresale un magnífico Frank Langella, no tanto por su escalofriante rostro, sino por su inquietante presencia y sus perturbadores diálogos, en los que dice mucho y oculta más, todo ello a la vez. 

     Con todo, estamos ante un "quiero y no puedo", ante el eterno interrogante de "¿Qué hubiera pasado si...?" que tantas veces me estoy encontrando al acabar de ver una película. Esperemos que sólo sea una moda pasajera...¡Anda!, ya esta aquí de nuevo esa vocecilla...

No hay comentarios:

Publicar un comentario